Los implantes dentales son tornillos de titanio que colocamos tras un periodo de reposo llamado osteointegración en el hueso de la boca para sustituir a las raíces, estos permiten colocar coronas de materiales cerámicos para reproducir la forma perfecta de un diente o muela natural.

El mantenimiento es similar al de los dientes propios y la duración es similar o mayor que los dientes naturales.

Los implantes dentales son la mejor solución para reemplazar piezas dentales que hayan sufrido traumatismos o enfermedades y deban extraerse. Ideal para pacientes con las siguientes patologías:

  • Pacientes con huecos por pérdida de uno o varios dientes.
  • Pacientes con periodontitis avanzada con movilidad de todas las piezas dentales.
  • Pacientes con dentaduras tradicionales que quieran dientes fijos que no se les mueva.
  • Pacientes con traumatismos dentales en los que no se puedan salvar los dientes afectados.

Tipos:

  • Implantes unitarios.
  • Varios implantes para un sector (tipo puente).
  • Implantes múltiples para una arcada completa.