Con las dermoabrasiones buscamos eliminar las capas más superficiales y envejecidas de la dermis, eliminando asperezas e irregularidades, y consiguiendo una piel más suave y joven.
Hay distintos métodos, como las dermoabrasiones químicas con distintos peeling de diferentes profundidades y dermoabrasiones mecánicas con el famoso tratamiento de Punta de Diamante.
El tratamiento con Punta de Diamante es una técnica para mejorar la apariencia de la piel y eliminar las células muertas. Es un tratamiento no invasivo, no produce dolor por lo que no requiere anestesia. Esta técnica es apta para todo tipo de pieles y especialmente beneficiosa para personas con piel grasa, manchas y/o cicatrices.
Cada sesión podrá durar entre 30-45 minutos. Los beneficios que aportan este tratamiento son:
- Elimina en profundidad las células muertas y suciedad de la piel
- Minimiza las marcas de acné
- Reduce cicatrices superficiales
- Reducción de arrugas finas
- Favorece y mejora la circulación sanguínea
- Oxigena y rejuvenece la piel
- Unifica el tono de la piel
- Exfoliación y renovación celular
- Efecto rejuvenecedor
- Piel más suave y luminosa
- Mejora la textura de la piel