El tratamiento Dermaplaning se ha convertido en uno de los tratamientos en tendencia y no es de extrañar puesto que es apto para todo tipo de pieles y el resultado es inmediato y espectacular.
Es un tipo de exfoliación indolora que tiene como resultado una piel más luminosa, suave y tersa.
Los resultados suelen durar alrededor de tres semanas o un mes, esto depende siempre de cada persona. Sin embargo, al ser una exfoliación no invasiva, se puede realizar con cierta regularidad.
Este tipo de exfoliación física arrastra la capa más superficial de la piel, compuesta por células muertas y vello facial, lo que permite al organismo generar nuevas células.
A diferencia de otras exfoliaciones, no provoca dolor, ya que el bisturí se desliza suavemente por la piel. Asimismo, la piel no se daña ni se irrita. Aunque es un proceso de afeitado, porque elimina el vello facial, no se debe confundir con un afeitado convencional.
La principal función del Dermaplaning es eliminar las células muertas, esto mejora la suavidad, uniformidad y luminosidad de la piel. Esta exfoliación y limpieza favorece que los productos que apliquemos después penetren mejor, por lo tanto, son más efectivos.
Este método también permite reducir los brotes de acné. Al afeitar la piel, se destapan los poros obstruidos y se remueven las espinillas causadas por bacterias. Sin embargo, si una persona sufre de acné quístico no se recomienda realizar este tratamiento.
Este tratamiento se puede hacer en todo tipo de pieles, incluso pieles sensibles que no soportan los tratamientos con químicos.
Sin embargo, lo deben evitar personas con las siguientes condiciones: acné severo, quemaduras solares, rosácea, eccema, psoriasis y/o infecciones como por ejemplo herpes.
Cada sesión podrá durar entre 30-45 minutos. Los beneficios que aportan este tratamiento son:
- Elimina células muertas y vello facial
- Elimina suciedad
- Reduce cicatrices de acné
- Aclara manchas, unificando el tono de la piel
- Mejora arrugas finas y poco profundas
- Exfolia en profundidad sin irritar la piel
- Devuelve la luminosidad a la piel
- Mantiene el rostro suave y sedoso
- Estimula la regeneración celular
- Recupera la textura de la piel y su elasticidad
- Favorece la absorción de otros tratamientos y productos